Hace 7 años de mi visita a Calima de Dani García en Marbella. El restaurante, que contaba con 2 estrellas Michelín ya no existe como tal. Actualmente es Dani García Restaurante, sigue en Marbella, aunque en otra ubicación, y sigue contando con 2 estrellas Michelín. 7 años después vuelvo a encontrarme con la cocina de este gran chef en el Restaurante Bibo Dani García en Madrid.

El local de Bibo Dani García en Madrid
El restaurante se encuentra en el Paseo de la Castellana. Es un local increíble, enorme, y con un despliegue de personal de sala espectacular. Hasta un globo aerostático podemos encontrar en la zona de coctelería.
¿Y qué comer en Bibo Dani García en Madrid?
La carta es muy extensa, quizás demasiado. Suena todo muy apetecible, así que obliga a más de una visita para probar todo lo que uno quisiera. Comenzamos con un aperitivo de la casa, y con él, un bollito de pan artesanal con mantequilla francesa Isigny Ste Mère de la que podría alimentarme en exclusiva varios meses.
Para comenzar en el Restaurante Bibo Dani García en Madrid
Comenzamos con unas croquetas cremosas de jamón con polvo seco de tomate y otras de tinta, realizadas a base de un guiso tradicional de chipirones en su tinta.
Continuamos con un original guacamole hecho al momento a la vista del cliente. Está muy bueno, con un puntito picante y lleva, además de los ingredientes del guacamole, edamame, burrata rota y hierbabuena.
Oda al atún rojo de barbate en Bibo Dani García
El atún ha sido y sigue siendo uno de los productos estrella de la cocina de Dani García y en Bibo tiene un gran protagonismo. Nos decantamos por un increíble tartar de atún de toro de almabraba ahumado, soja y sésamo con yuzu. El plato llega a la mesa con una campana de cristal con humo, que al destaparse despliega por la mesa todo ese aroma ahumado que tiene el plato.
Vamos con algo de carne en Bibo Dani García
Si hay algo que no te puedes ir sin probar en Bibo Dani García es el brioche de rabo de toro desmigado, láminas de champiñón, salsa DG y rúcula. Tierno, sabroso, está realmente bueno y la salsa de Dani García brutal.
La hamburguesa de Dani García, conocida como Burger Bull, está tremenda. Tomamos la versión grande de 180 gr. de carne de chuleta a la parrilla, salsa Bull, queso Havarti y lechuga trocadero, acompañada de patatas fritas. La clave está en la salsa, y la buena noticias es que la puedes comprar online.
Para acabar la parte salada de la cena elegimos la pluma de cerdo ibérico macerada con miso y acompañada de patata ratte machacada y frita, calabaza, mojo rojo y acelgas. La carne no podía estar más tierna, tostadita por fuera y jugosa por dentro.
No postre no party
La fiesta dulce comienza con un postre no excesivamente dulce. Es una Cheesecake al estilo NYC de queso payoyo con rosas, frutas y frutos rojos. El queso payoyo le da un sabor a esta tarta de queso muy diferente y especial.
La falta de dulzor de la tarta de queso, fue compensada rápidamente con un postre para golosos profesionales. Con el nombre del postre se entiende todo: Nutella para morir. Lleva helado de Nutella rebozado en palomitas y avellanas, cremoso de caramelo, bizcocho de coco y mermelada de limón.
Pues todo este festín nos lo zampamos 2 adultos y 2 niños por 179 €. Para pagar más gustoso la cuenta pedí un whisky Sour. Un rico cocktail a base de whisky, zumo de limón, azúcar y hielo, con el que ir directo a la cama. Por cierto, ¡de los 16 € que costó el cocktail, no había sido consciente hasta escribir este post!
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